NO TE MEREZCO

La luz ya estaba cuando llegaste,
el viento ya soplaba,
la sal aliñaba el mar,
las nubes vertían su esencia,
los árboles alzaban el torso,
la piedra sostenía el cielo,
las dunas caminaban,
los inviernos dormitaban,
el río moldeaba los valles,
el fuego jamás moría.

Tú no dibujaste el sol,
no bruñes la luna,
no desposaste a saturno,
no jugueteas con eclipses.

Todo estaba ya,
cuando llegaste,
con las manos vacías
y aquella mirada.

Ya estaba todo,
y entonces tu piel se vistió de luz,
el viento te silbó,
el mar acudió en tu busca,
rieron las nubes,
los árboles aplaudieron a tu paso,
la piedra quiso ser tu camino,
las dunas fueron tu playa,
los inviernos, tu primavera,
cada valle, un secreto,
cada llama, un beso.

Y yo,
ni sol,
ni luna,
ni anillos,
eclipsado.
No te merezco.

Juan, noviembre de 2012

Taller de poesía